Queremos hacer un vivero ¿cómo lo hacemos?
El CEIP Vélez de Guevara en Torreblanca (Sevilla) nos ha contagiado con su energía, sus colores y el espíritu de Wangari que recorre cada rincón y cada esquina de este centro. Los avances de estas últimas semanas han sido increíbles, y como al equipo de EcoHuertos Escolares nos encanta compartir las experiencias bonitas no tenemos más opción que contaros las cositas que han estado haciendo el profesorado y el alumnado de este centro.
Están inmersos en el proyecto de centro ‘Wangari Ilumina’ que ha funcionado como eslabón perfecto para conectar con EcoHuertos Escolares. El objetivo es poner en valor la agroecología, los derechos de la naturaleza, el trabajo en comunidad y la tarea esencial de reverdecer los espacios urbanos como una de las mejores vías para acabar con el gris asfalto que recorre nuestras ciudades, además de crear y fortalecer vínculos comunitarios y barriales.
Después de trabajar en el huerto escolar, las sesiones en el aula, realizar salidas de campo al entorno del colegio y tomar notas en sus cuadernos de campo han ideado una propuesta magnífica para transformar su barrio en un espacio más amable y amistoso para la vida. En un espacio con más árboles, más plantas, más verde.
- CEIP Vélez de Guevara: - Queremos hacer un vivero ¿cómo lo hacemos?
- EcoHuertos Escolares: - Vamos para allá y nos ponemos a trabajar.
La propuesta del vivero nos deslumbró, nos encantó. Así que durante dos jornadas hemos estado trabajando codo con codo para darle forma y contenido a esta propuesta maravillosa.
El primer día estuvimos en las aulas y el huerto, conociéndonos entre todas, conociendo las semillas, aprendiendo como realizar semilleros de diferentes plantas y flores: albahaca, alhelí, calabaza… también trasplantamos mientras aprendíamos sobre sustrato y humus de lombriz.
Durante la segunda jornada nos pusimos manos a la obra con nuestro vivero, construimos una casa cómoda y calentita para todas las plantas, colocamos nuestras mesas-viveros en un sitio con mucha luz, distribuimos más sustrato, construimos los techos, y sembramos más plantas que en un futuro reverdecerán el colegio y el barrio.
Unos días de trabajo conjunto que nos ha llenado de energía y donde hemos podido volver a comprobar como los colegios son motores de cambio fundamentales para transformar la realidad en la que vivimos.
Construyendo el vivero
Nuestro vivero ¡casi terminado!